Discurso de clausura de la Directora Ejecutiva del ITC Arancha González durante el Foro Mundial para el Desarrollo de las Exportaciones

Damas y caballeros,
estimados amigos:

Hemos llegado al final de dos días de debates muy productivos.

Quisiera agradecer especialmente al Primer Ministro y al Ministro de Economía y Comercio que estuvieran presentes ayer, a nuestros apreciados ponentes que nos han dado mucho en lo que pensar, y a cada uno de ustedes por acompañarnos en esta conferencia.

Asimismo, quisiera dar las gracias a la Junta del Banco de Desarrollo de Qatar y a su Director General Abdulaziz Bin Nasser Al-Khalifa, por ayudarnos a convertir este evento en un éxito. El ITC está encantado de trabajar con el Banco de Desarrollo de Qatar para garantizar que un sector de las pymes dinámico y diversificado ayude a Qatar a alcanzar su ambiciosa visión para 2030.

Finalmente, el equipo del ITC quisiera expresar nuestra gratitud a Qatar por ser un anfitrión tan fantástico. No podríamos haber elegido un lugar mejor en Oriente Medio para celebrar el primer Foro Mundial para el Desarrollo de las Exportaciones.
Las reuniones entre empresas han resultado en contratos valorados en $EE.UU. 80 millones.

Como dije en mi discurso de apertura, el objetivo del Foro Mundial para el Desarrollo de las Exportaciones consiste en hablar sobre negocios y hacer negocios.

Pues bien, más de 700 personas, procedentes de 92 países —incluidos 26 países menos adelantados— hemos hablado sobre negocios. Y también hemos hecho negocios. Las increíblemente productivas reuniones entre empresas han dado lugar a 90 declaraciones de intenciones para hacer negocios por un valor de $EE.UU. 80 millones. Los acuerdos provisionales abarcan diferentes sectores, desde el agua embotellada y la producción de zumos hasta los servicios de distribución. Además, cabe destacar que la mayoría de los acuerdos favorecen las inversiones y el comercio Sur-Sur. Cinco organizaciones de promoción del comercio —de Georgia, Bangladesh, Nigeria, Viet Nam y Egipto— han firmado acuerdos de cooperación para el desarrollo de las exportaciones. Si bien es cierto que nosotros hemos facilitado los encuentros, son ustedes los que han cerrado los acuerdos. Por favor, no dejen de mantenernos informados sobre cómo se desarrollan estos contactos. El ITC les puede ayudar a que sean fructíferos.

El tema del WEDF ha sido: Innovar, invertir e internacionalizar. Las empresas, especialmente las pequeñas y medianas empresas, deben disponer de la capacidad para hacer estas tres cosas, a fin de poder convertirse en la columna vertebral de unas economías sostenibles, productivas y competitivas. Esta es una de las razones por la que los acuerdos cerrados aquí son tan importantes: operar a través de las fronteras ayuda a las empresas a aprender nuevas formas de innovar y de ganar productividad.

No obstante, hay mucho que los formuladores de políticas, las empresas, las instituciones de apoyo al comercio y la inversión, así como las agencias internacionales podemos hacer para crear un entorno más propicio para estas tres "i". Tras haber podido intercambiar opiniones con ustedes en estos últimos dos días, les puedo garantizar que vuelvo a casa con algunas ideas nuevas sobre qué más podemos hacer, y espero no ser la única persona con esa sensación.

Centrémonos en la "innovación". Durante una sesión de ayer, pudimos oír en qué sentido la tecnología está equilibrando el terreno de juego para que las pymes entren en los mercados a través del comercio electrónico. Un ponente comentó: "Hace veinte años, la internacionalización tardaba años. Hoy ocurre en minutos". Sin embargo, las empresas necesitan contar con una mano de obra que sepa desenvolverse en el mundo digital para poder aprovechar plenamente los beneficios del comercio electrónico. Y a pesar de que cada vez más pymes son internacionales desde su comienzo, siguen necesitando ayuda para cumplir con los reglamentos, las normas y el resto de medidas no arancelarias. Por esta razón, hace tan solo unas horas lanzamos una publicación y herramienta destinada a ayudar a las pymes a aprovecharse del creciente mercado de los alimentos halal. Durante los próximos meses, el ITC se centrará en el comercio electrónico. Pasar a la siguiente fase en lo que se refiere a los productos halal también será una prioridad.

El segundo pilar es la "inversión". La inversión extranjera puede ser un medio importante para las nuevas ideas y la tecnología moderna. Puede fomentar la diversificación económica, como hemos podido comprobar en Qatar, y esto, a su vez, hace que el crecimiento resista mejor la volatilidad vinculada a los sectores concretos. Hemos tomado nota de que la integración regional puede ayudar a alcanzar el tamaño de mercado que los inversores extranjeros buscan. Hemos oído ejemplos muy interesantes del África Oriental; da igual que entre por Rwanda o por Kenya, llegará a un mercado que es más grande que la suma de sus partes. Sin embargo, la eliminación efectiva de las barreras y la reducción de los costes y los tiempos comerciales requiere una gran voluntad política y la disposición para hacer frente a los intereses especiales. Hemos aprendido que las zonas especiales de exportación pueden actuar como laboratorios para las reformas políticas destinadas a atraer inversiones que luego se pueden extender a todo el país.

En lugar de simplemente reconocer la importancia del turismo, debemos asegurarnos de que se realizan mayores esfuerzos, a nivel nacional e internacional, para convertir el turismo en una fuente de crecimiento inclusivo.

Y no solo hay que invertir en infraestructura física o directamente en una fábrica en concreto. Hay que invertir en el principal activo de un país: su gente. Invertir en capital humano, en reforzar las competencias de la fuerza laboral, es la clave del éxito en el siglo XXI. Por esta razón, nos seguiremos centrando en el desarrollo de habilidades comerciales a través de nuestra Academia de Comercio para las pymes.

El último pilar es la "internacionalización". La internacionalización ya no se refiere solo a la exportación. Se trata de invertir. También de importar. De hecho, un rápido acceso a los productos importados se ha vuelto esencial para la competitividad de exportación. Cuando las pymes se conectan a los mercados, tanto nacionales como internacionales, esto se traduce en mejores puestos de trabajo y salarios para un amplio sector de la sociedad. Por esto es importante que el comercio siga ocupando un lugar central en nuestro programa. El comercio es un medio para promover el crecimiento.

Antes de acabar, quisiera que todos nos detengamos un momento a recordar que el comercio, la inversión y los acuerdos comerciales internacionales representan mucho más. De forma individual, son el alma de las pymes competitivas. En conjunto, generan oportunidades para las mujeres, los hombres y los jóvenes que, con demasiada frecuencia, no han podido ser partícipes de nuestra creciente prosperidad.

Esperamos que uno de los puntos centrales de los debates de la Conferencia Ministerial de la OMC, que se celebrará en Nairobi, Kenya, en diciembre, sea garantizar que el sistema multilateral de comercio siga siendo abierto y transparente, con el fin de permitir que las pymes lleven a cabo su actividad comercial.

Para concluir, me gustaría resaltar que me complace especialmente que esta conferencia se haya desarrollado en el marco de los compromisos que todos los Miembros de las Naciones Unidas adoptaron hace unas semanas en Nueva York a favor de los Objetivos Mundiales para el Desarrollo Sostenible. Como declaró ayer Valentine Rugwabiza [Ministra de la Comunidad del África Oriental]: "recordemos el WEDF 2015 como el principio de la puesta en marcha de los Objetivos Mundiales, un donde se une el sector privado con el público".

Finalmente, estoy encantada de poder anunciar que la próxima edición del Foro Mundial para el Desarrollo de las Exportaciones tendrá lugar el próximo año en Sri Lanka. Espero verles a todos allí el año que viene.

Gracias.