Un factor importante que explica por qué la producción de algodón se ubica en países donde los costos son relativamente altos son las medidas estatales que distorsionan la producción y el comercio. Las ayudas directas a los ingresos y en materia de precios concedidas para el algodón en todo el mundo pasaron de $3.800 millones en 1997/98 a $5.800 millones en 2001/02. Las estimaciones para 2005/06 sitúan el importe de estos programas de ayuda directa para el algodón en $5.000 millones (véase la figura 1.19). Catorce países, que en total representan las tres cuartas partes de la producción mundial de algodón, ofrecieron a los productores ayudas directas a los ingresos y en materia de precios en 2001/02, una temporada en la que los precios cayeron a niveles históricos. Las consecuencias de estos programas son que los productores de países en los que no existen medidas similares de protección se ven obligados a incrementar su producción y a soportar la carga que supone adaptarse a los bajos precios del algodón.
Fuente: CCIA
En 2005/06, las mayores ayudas públicas por libra de producción de algodón fueron las concedidas por la UE a los productores de Grecia y España, que alcanzaron una media de $0,75 por libra de producción de fibra, o aproximadamente unos $900 millones en total (véase la figura 1.20). La UE anunció en 2004 que a partir de enero de 2006 se pagará el 65% del importe de las ayudas para el algodón directamente a los agricultores, cualquiera que sea su producción actual. Esto significa que, desde comienzos de 2006, las ayudas que reciben los productores de algodón de Grecia y España equivaldrán al 65% de las ayudas que recibían hasta entonces, tanto si continúan produciendo algodón como si no, y solamente el 35% de las ayudas públicas tendrá como base la producción real. Este cambio, conocido como disociación de las ayudas, está provocando una caída de la producción. En 2004/05 la UE produjo 500.000 toneladas, y las estimaciones para 2006/07 son de 370.000 toneladas. El descenso de la producción durante 2006/07 fue debido, en parte, a condiciones climatológicas adversas, especialmente en España.
En 2005/06, las ayudas directas a los productores de algodón de los Estados Unidos se situaron de media en $0,17 por libra de producción, y alcanzaron un importe total de $1.920 millones. Estas ayudas incluyen los pagos a los agricultores con arreglo a la diferencia entre la media de los precios agrarios y el precio indicativo. Los productores estadounidenses recibieron además el pago de una suma a tanto alzado basada en la producción histórica. Al igual que Europa, los Estados Unidos no intentan restringir las importaciones de algodón en un esfuerzo por apoyar los precios nacionales. Algunos elementos del programa estadounidense de ayudas al algodón fueron criticados por la comunidad internacional durante las negociaciones comerciales en la Ronda de Doha de la OMC debido a la importancia excepcional del algodón en las economías de muchos países en desarrollo. En la Ronda de Doha los Estados Unidos se declararon dispuestos a reducir o eliminar las subvenciones para el algodón, pero solamente en el contexto de un acuerdo global sobre agricultura. Lamentablemente, en mayo de 2007, la Ronda de Doha aún no había concluido porque no se alcanzó un

Fuente : CCIA.
El CCIA ha estimado el valor de las ayudas públicas concedidas en China en 2005/06 al sector del algodón en $0,16 por libra o en casi $2.000 millones. A diferencia de Europa y los Estados Unidos, China no efectúa pagos directos a los productores de algodón, sino que aplica un complejo sistema de cuotas y licencias de importación para frenar el comercio y mantener los precios nacionales por encima del nivel mundial. El Gobierno de China ha comunicado a la OMC que no subvenciona el algodón. Las diferencias entre los precios internacionales y los precios internos de China, ajustados en función de una calidad y ubicación comunes, son documentados, entre otros, por el CCIA.
Las medidas estatales encaminadas a impulsar la producción de algodón repercuten negativamente en el precio medio internacional a corto plazo. Las estimaciones sobre el grado de repercusión varían, aunque la mayoría de los economistas coinciden en señalar que la eliminación de las subvenciones elevaría los precios medios del algodón entre un 5% y un 20%, o incluso más, en opinión de algunos.
No obstante, si se eliminaran las subvenciones, otros países aumentarían su producción al cabo de dos o tres temporadas en respuesta a la subida de los precios, y son muchos los investigadores que opinan que el impacto a largo plazo de las medidas estatales sobre los precios del algodón será probablemente menor que los impactos a corto plazo. Las distorsiones que las medidas estatales provocan en la producción de algodón son, sin embargo, muy considerables. Según algunas estimaciones, si desaparecieran las ayudas estatales para el algodón y otros productos básicos, la producción de algodón en los Estados Unidos se reduciría en una tercera parte al cabo de varias temporadas, y en el caso de China, caería probablemente en casi una décima parte. En consecuencia, si se eliminaran las ayudas estatales, entre dos y tres millones de toneladas de la producción de algodón se desplazarían desde Europa, los Estados Unidos y China hacia otros países con costos de producción más bajos.