© Centro de Comercio Internacional, Forum de Comercio
Internacional - No. 3/2004

Retos
Los beneficios económicos del comercio no llegan siempre a los
más pobres.
El comercio puede fomentar el crecimiento de un país y reducir la
pobreza en tres niveles básicos. Primeramente, la adopción de
políticas favorables a la expansión del comercio conlleva un
aumento del ingreso y de los recursos fundamentales para el
desarrollo. En segundo lugar, los gobiernos pueden promover las
exportaciones en sectores con un óptimo potencial de generación de
empleos e ingresos. En tercer lugar, también pueden ayudar a los
sectores más pobres - en la práctica ajenos a la economía formal -
a convertirse en partícipes de las actividades de
exportación.
Los países en desarrollo son capaces de asumir estos
desafíos.
En muchos países, las dificultades residen en los niveles
dirigentes. Los encargados de definir las estrategias de desarrollo
no prestan suficiente atención a la integración del comercio en
dichas estrategias. A menudo, se habla de que el comercio es el
motor del crecimiento, pero las estrategias de una mayoría de
países en desarrollo son más bien un obstáculo que un aliciente
para el comercio. Además, hay muy pocos modelos que orienten los
esfuerzos nacionales encaminados a reducir la pobreza mediante el
comercio.
Por otra parte, los sectores de exportación que más podrían
contribuir a reducir la pobreza no son siempre incluidos en las
estrategias exportadoras nacionales. Para reducir la pobreza, lo
que cuenta es el tipo de crecimiento que genere el comercio. Por
ende, también se necesita crecimiento en los sectores capaces de
integrar a los pequeños productores en la cadena de valor de
productos y servicios.
Por último, las comunidades pobres no suelen disponer de las
capacidades empresariales indispensables para operar en el comercio
mundial. Cuando se trata de aprovechar las nuevas oportunidades
comerciales, los sectores pobres pueden encontrarse desventajados
por sus carencias en formación, capacitación empresarial o
contactos con quienes pueden ayudarles a iniciar o ampliar una
actividad en la economía formal.
Soluciones
- Integrar el comercio en las estrategias de reducción de
la pobreza. Los gobiernos deben empezar a considerar que
el comercio y la reducción de la pobreza son indisociables.
- Promover sectores de exportación favorables a los
pobres. Identificar y fomentar sectores o segmentos con
buen potencial exportador, que acojan favorablemente las
capacidades de los productores pobres.
- Orientar la ayuda a la exportación a sectores
pobres. Promover la formación de agrupaciones
empresariales entre miembros de comunidades pobres, a fin de
superar las dificultades propias de la acción individual. También
se debe alentar las complementariedades entre exportadores
experimentados y comunidades pobres.
- Facilitar servicios esenciales de apoyo al
comercio. Los pequeños productores tienen la voluntad y la
capacidad para hacer negocios, pero necesitan contar con servicios
públicos de buena calidad - información comercial y de mercados,
capacitación exportadora y formación de redes - para integrarse en
los mercados.
Aporte del CCI
- El programa de reducción de la pobreza mediante las
exportaciones promueve, mediante proyectos piloto, métodos
para integrar a las comunidades pobres en el comercio, centrados en
su vinculación con cadenas de exportación de los productos y
servicios que éstas pueden proveer. Abarca sectores de baja
intensidad de capital, como el turismo comunitario, la manufactura
ligera, textiles, cuero y productos agrícolas.
El CCI y sus asociados locales ayudan a los productores a
organizarse en grupos para obtener capacitación y asistencia
empresarial. Además, el CCI hace conciencia entre las instituciones
de apoyo al comercio y las autoridades sobre las necesidades de
fomento empresarial de estos productores. - El CCI ayuda a desarrollar los sectores más
prometedores, utilizando sus eficaces instrumentos
analíticos para detectar los sectores con un potencial de demanda,
y también sus conocimientos de los mercados que interesan a los
productores pobres, como los productos básicos, textiles y
servicios.