"La guerra civil entre 1990 y 2001 generó al menos un millon de
refugiados y destruyó casi por completo nuestros servicios. Las
Naciones Unidas nos declararon seguros en 2002 pero hay quien
todavía no sabe que la guerra terminó y los empresarios recuerdan
las atrocidades que vieron. De ahí que sean pocos quienes vienen a
Sierra Leona a hacer negocios. Todavía arrastramos esa imagen de
país en guerra", explica Abu Bakkar Kebbay.
Para contribuir a la reintegración de los refugiados que
regresan y los agricultores desplazados por el país, el nuevo
Gobierno se propuso revitalizar aquellos sectores de Sierra Leona
que prosperaban antes de la guerra. Uno de esos sectores es el de
las especias pues ofrece muchas oportunidades de crear un gran
número de puestos de trabajo y, por ende, de reducir la
pobreza.
Además, las especias tienen un alto potencial de exportación.
Cuando el Gobierno de Sierra Leona se propuso estimular la
economía, se centró en fomentar nuevos proyectos empresariales y
oportunidades de exportar con alto potencial de crecimiento. En ese
contexto, definió el desarrollo del sector de las especias, en
general, y la producción y exportación de jengibre, en particular,
como una prioridad de su estrategia de desarrollo económico para
crear puestos de trabajo y generar ingresos para los agricultores
desplazados.
Puestos de trabajo e ingresos
La venta de jengibre de calidad superior a los mercados europeos
es una de esas oportunidades de exportación. Además, ofrece la
ventaja de aportar ingresos a los grupos más pobres y generar
empleo, en particular, para las mujeres.
Años antes, el Gobierno había intentado revitalizar las
exportaciones pero abandonó el proyecto a causa de la guerra. El
comercio de jengibre de Sierra Leona, otrora floreciente negocio de
exportación, se había venido abajo debido a la competencia de los
países asiáticos que cultivan una variedad de jengibre más
apreciada en occidente.
En 2002, en el marco de un programa asistencial de China, la
Corporación de Desarrollo de las Exportaciones e Inversión de
Sierra Leona (SLEDIC) obtuvo 53 toneladas de semillas de jengibre
chino. SLEDIC las distribuyó en las zonas productoras de jengibre
de los distritos de Kambia y Moyambo, donde también impartió
formación e hizo demostraciones. Pero debido a las malas prácticas
agrícolas y la inexperiencia con la variedad mejorada, la cosecha
fue relativamente escasa.
En octubre de 2003, el Ministerio de Comercio pidió ayuda al CCI
para desarrollar las exportaciones de jengibre. Este último elaboró
un programa para proporcionar trabajo e ingresos a más de 9.000
agricultores de subsistencia, sobre todo a las mujeres que
representan más del 60% de la mano de obra agrícola.
Un experto internacional hizo una evaluación preliminar de las
condiciones de la oferta y la demanda. Propuso exportar a Europa
jengibre procesado, el segundo año de producción con mejores
métodos y tecnología. Pelar, secar y acondicionar el jengibre
aumenta su valor en un 90% y da trabajo a más agricultoras.
Demanda imprevista, teléfonos móviles y
bicicletas
El CCI organizó un taller técnico sobre el tratamiento del
jengibre después de cosechado y asesoró sobre la demanda, las
tendencias y la promoción de mercado. Asimismo, dispuso que dos
funcionarios de Sierra Leona (un coordinador de extensión agrícola
y un especialista en desarrollo de las exportaciones) visitaran la
India, mayor productor y exportador de jengibre de alta
calidad.
En Sierra Leona, la variedad local de jengibre se suele utilizar
más bien para bebidas que para alimentos. Además de tener un aroma
y sabor intensos, se le atribuye la valiosa propiedad de reducir la
presión sanguínea. Los funcionarios de Sierra Leona encontraron
posibilidades de exportar dicha variedad -cultivada en una
superficie cinco veces mayor que la variedad mejorada- en el
mercado de aceites esenciales de la India.
Los US$ 100.000 previstos para el proyecto incluían la compra de
motocicletas, bicicletas y teléfonos móviles para los agrónomos y
trabajadores de extensión. Los teléfonos y las bicicletas
facilitaron la recolección y divulgación de datos, así como el
seguimiento y la evaluación del proyecto, principalmente, en la
estación de lluvias.
Gracias a los talleres de formación e información que se
organizaron en las zonas de cultivo del jengibre, los agricultores
consiguieron cuadruplicar sus resultados al final del tercer año,
lo que les permitió devolver la dotación inicial de semillas que
habían recibido.
Primeras exportaciones de jengibre en 22
años
En 2006, Sierra Leona consiguió preparar cuatro pruebas de
exportación: dos toneladas de la variedad china y otras dos de la
variedad local que fueron las primeras exportaciones de jengibre
desde 1984. Entre los compradores había importadores de 11 países,
entre ellos, Alemania, India, Nigeria, Países Bajos, Reino Unido y
Sudáfrica. En 2007, se ha previsto exportar 80 toneladas de
jengibre seco, lo que requerirá procesar 320 toneladas de jengibre
fresco.
Los análisis indican que el jengibre es de buena calidad, está
exento de aflatoxinas y cumple las normas de la Asociación Europea
de Especias. El CCI financió estas pruebas de control de calidad
que contribuirán a que los exportadores obtengan mayores
ingresos.
Hasta ahora, en el marco del proyecto se han creado 150 puestos
de procesador y 30 de capataz, cargador, transportistas y otros. El
proyecto también generó ingresos para el Estado por concepto de
tarifas portuarias.
Visto que actualmente el cultivo de jengibre se ve limitado por
insuficiencia de semillas, la agencia de desarrollo de las
exportaciones se propone obtener al menos 50 toneladas para
mediados de 2007 a fin de ampliar el proyecto.
Intercambio de conocimientos
La capacitación que imparte el CCI en el proyecto del jengibre
forma parte de la cooperación técnica entre países en desarrollo,
lo que permitió que se establecieran vínculos entre agricultores y
expertos de Kenya, India, Sierra Leona y Uganda.
La cooperación entre Kenya y Sierra Leona, por ejemplo, tiene el
potencial de acrecentar el comercio intraafricano.
Para más detalles, diríjase aRamin Granfar,
Oficial de Promoción del Comercio.
Este artículo se basa en informes de C.K. George y Roger
Clarke, consultores del CCI.
Entrevista de Prema de Sousa y Peter Hulm.